Gareth Bale ha revelado que nunca fue un gran aficionado al golf, a pesar de la percepción pública que se formó durante su etapa en el Real Madrid. En una reciente entrevista, el exfutbolista galés expresó que se sintió «maltratado» por la prensa española debido a la desinformación que rodeaba sus actividades fuera del campo, particularmente su afición por el golf. Bale, quien se retiró en 2023 tras el Mundial de Qatar, fue objeto de críticas feroz por su supuesta preferencia por jugar para su selección nacional y practicar golf en lugar de centrarse en su carrera con el club.
Durante su tiempo en el Madrid, Bale logró un impresionante palmarés, incluyendo cinco títulos de la UEFA Champions League y tres campeonatos de LaLiga. En una conversación con GQ, que se llevó a cabo en un campo de golf, Bale reflexionó sobre su trayectoria. «Obviamente, muchos jugadores llegan a Madrid para ser un Galáctico, pero yo fui allí para jugar al fútbol. Lo que logré como jugador galés en el extranjero fue increíble», comentó. Sin embargo, el delantero admitió que la imagen que se creó sobre él era errónea: «Nunca jugué mucho al golf».
La polémica bandera y las críticas
Una de las situaciones más controvertidas ocurrió cuando Gales se clasificó para la Eurocopa 2020. Durante la celebración, los jugadores posaron frente a una bandera que decía «Wales. Golf. Madrid. En ese orden». Esta imagen provocó una ola de críticas en España, donde muchos interpretaron que Bale priorizaba su amor por el golf por encima de su compromiso con el club. «Esa bandera es algo por lo que me sentí maltratado», afirmó Bale. «Nadie sabía cuánto golf realmente jugaba. Si me preguntas ahora cuántas veces crees que jugué al golf, probablemente dirías tres o cuatro veces a la semana, pero en realidad solo jugaba una vez cada dos o tres semanas».
Un malentendido persistente
Bale aclaró que siempre fue profesional y se dedicaba plenamente a su carrera futbolística: «Nunca jugué durante ocho horas; siempre fui muy profesional al respecto». La controversia aumentó cuando fue fotografiado celebrando junto a sus compañeros frente a la mencionada bandera. «Acabábamos de clasificar para la Eurocopa y estaba celebrando con mis amigos. Alguien puso la bandera delante de mí; ¿qué se supone que debía hacer? No podía tirar la bandera de mi país al suelo», explicó.
El exjugador también compartió cómo esta desinformación afectó su imagen en España: «Me sentí muy mal porque todo se basaba en mentiras. Nunca he priorizado el golf sobre mi país o mi club; físicamente no he hecho nada malo». Las palabras de Bale destacan no solo una lucha personal contra los estereotipos, sino también un llamado a la comprensión y a la verdad detrás de las historias que rodean a los deportistas.
Con un legado marcado por sus éxitos y una carrera llena de momentos memorables, Gareth Bale sigue siendo un tema de conversación relevante en el mundo del fútbol, especialmente cuando se trata de desmitificar su relación con el golf.
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