Erling Haaland volvió a demostrar su estatus como uno de los delanteros más temibles del mundo durante el encuentro contra el Real Madrid. El atacante de Manchester City se vio inmerso en una intensa batalla con Antonio Rüdiger y Raúl Asencio, quienes intentaron contener su ímpetu. Sin embargo, la lucha terminó favoreciendo al noruego, quien provocó un penalti que resultó en el gol del 1-2. En una conversación con TNT Sports, donde compartió set con Steven Gerrard, Joleon Lescott y Steve McManaman, Haaland abordó su enfrentamiento con una sinceridad notable. «Asencio me empujó desde el primer minuto, quería la pelea. A mí me gusta eso. No me molesta en absoluto», comentó entre risas, dejando claro que prefiere los partidos donde la confrontación es total. Sobre Rüdiger, su análisis fue similar: «Con él, era una guerra en cada duelo. Me empujó demasiado. Para mí, fue un penalti claro.» Esta franqueza resalta la personalidad competitiva de Haaland: no solo acepta el desafío, sino que lo busca.
En su charla con TNT Sports, que también fue recogida por AS, el delantero expresó un deseo sincero: no haber podido enfrentarse a Kylian Mbappé en el césped. «Cuando te enfrentas a los mejores, eso te da un impulso mental. Todos pensábamos que jugaríamos contra él», reveló. La anticipada batalla entre estos dos gigantes del fútbol se vio empañada por la ausencia del francés, dejando a Haaland con un sabor agridulce tras el partido. A pesar de la rivalidad deportiva, el noruego no escatimó en elogios hacia el Real Madrid y su emblemático estadio: «Jugar en el Bernabéu es especial. Miras a tu alrededor y es increíble. Es exactamente el tipo de partido que quieres vivir».
Un formato de competición que entusiasma
A pesar de las críticas hacia el nuevo formato de la competición, Haaland lo defendió con entusiasmo: «¿Más partidos? ¡Es genial! Me encanta eso». Difícilmente se le puede contradecir al observar sus estadísticas impresionantes: 55 goles en 54 encuentros en competiciones europeas. El terreno continental se ha convertido en su hábitat natural. Más allá del enfrentamiento personal, Haaland reconoció que Manchester City no ofreció su rendimiento más sólido en este encuentro: «Fue un partido loco, lleno de transiciones. Podríamos haber marcado uno más. Jeremy también tuvo ocasiones. Pero aquí siempre es complicado».
Una victoria crucial para los Skyblues
Este triunfo era vital para los Skyblues tras la derrota ante Leverkusen. «Si no ganábamos hoy, la situación se habría complicado», admitió Haaland. «Esta victoria nos mantiene en el top 8. Ahora hay que terminar el trabajo». Con su habitual mentalidad centrada, concluyó: «Disfrutamos unas horas y luego volvemos al trabajo. Nuestro calendario es loco y debemos mantenernos en forma. Partido tras partido».
La determinación de Haaland y su capacidad para enfrentar desafíos son elementos que seguirán definiendo su carrera y su impacto en el fútbol europeo.


Comentarios
0 comentarios
Inicia sesión para comentar