Kylian Mbappé ha decidido alejarse del bullicio mediático español durante la pausa invernal y se ha trasladado a Marruecos para apoyar a sus amigos en la Copa Africana de Naciones (CAN) 2025. El capitán de la selección francesa ha sido visto disfrutando de la cultura y el ambiente vibrante que rodea este prestigioso torneo. Según el diario AS, su conexión con Marruecos es profunda, ya que aprecia no solo la hospitalidad de su gente, sino también el fervor que se vive en los estadios.
Mbappé llegó a Rabat a principios de semana acompañado de su familia, y su presencia no pasó desapercibida. Fue visto en las gradas del Estadio Moulay Abdallah, disfrutando de los cánticos de los aficionados. Su aparición fue especialmente significativa durante el crucial partido entre Marruecos y Malí, donde mostró su apoyo al portar una camiseta con el nombre de Achraf Hakimi, un gesto que simboliza su amistad y solidaridad con su excompañero del Paris Saint-Germain.
Un viaje guiado por la amistad
La visita de Mbappé al torneo va más allá de un simple interés personal por el fútbol. Refleja los lazos que ha forjado con varios jugadores marroquíes clave. Su amistad con Hakimi es bien conocida; ambos compartieron varias temporadas en París, creando una conexión que ha perdurado tras la salida de Mbappé al Real Madrid en junio de 2024. Este vínculo humano explica en gran medida por qué se siente tan cómodo en Marruecos, donde ha expresado su deseo de volver siempre que su agenda lo permita.
Un impacto más allá del fútbol
Además, la estancia de Mbappé en Rabat tiene implicaciones deportivas más amplias para el vestuario del Real Madrid. Brahim Díaz, otro atacante del club blanco que ha optado por representar a Marruecos, también está participando en la CAN. Díaz ha brillado al marcar durante el torneo, contribuyendo así a las esperanzas de su equipo para avanzar a las etapas eliminatorias. La presencia de Mbappé no solo refuerza la cohesión entre los jugadores del club, sino que también subraya el compromiso del delantero francés con sus compañeros.
La relación de Mbappé con Marruecos se manifiesta no solo en su asistencia ocasional a los partidos, sino también en su aprecio por la cultura y el estilo de vida del país. Hakimi ha destacado públicamente el amor de su amigo por Marruecos y su entusiasmo genuino por el equipo nacional. Según el lateral derecho, Mbappé cree firmemente que los Leones del Atlas tienen lo necesario para conquistar esta CAN en casa.
Esta actitud humaniza considerablemente a la estrella mundial, quien suele ser vista únicamente a través del prisma de sus logros deportivos. En esta ocasión, se presenta como un apasionado aficionado dispuesto a apoyar a quienes considera cercanos. Su entusiasmo por las tradiciones locales y su alegría al ver jugar a sus amigos han sido muy bien recibidos por los medios marroquíes, quienes lo ven como un embajador excepcional.
Este viaje llega en un momento crucial para el Real Madrid, que disfruta de una merecida pausa invernal tras una primera mitad de temporada intensa. Mbappé acaba de cerrar un año 2025 histórico en términos deportivos, marcado por récords igualados, incluido uno perteneciente a Cristiano Ronaldo. Sin duda, este respiro marroquí parece ser la preparación ideal antes de reanudar las competiciones en La Liga.
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