Xabi Alonso, entrenador del Real Madrid, ha respaldado el llamado de Florentino Pérez a buscar «justicia» en la investigación sobre el caso Negreira, subrayando que «para el bien del fútbol, necesitamos conocer la verdad de lo que ocurrió». La polémica se centra en los más de 7 millones de euros que el FC Barcelona pagó a José María Enríquez Negreira, exvicepresidente del comité de árbitros, entre 2001 y 2018. Este caso ha llevado a figuras como Joan Laporta y exentrenadores del club catalán a testificar ante el juez encargado de la investigación.
En un discurso reciente durante la recepción navideña del club, Pérez criticó a los árbitros y a las autoridades futbolísticas españolas, calificando el escándalo como «el mayor en la historia del fútbol». En su intervención, Pérez también destacó que este escándalo podría haber tenido consecuencias significativas para otros clubes, insinuando que algunos podrían haber sido relegados debido a esta situación. Alonso se alineó con la postura del presidente, afirmando que «es fundamental para el bien del fútbol» esclarecer los hechos.
Un caso que sorprende al mundo
La investigación penal sobre el caso Negreira ha estado en curso durante dos años, con la jueza Alejandra Gil decidiendo si procederá a un juicio completo. Aunque Barcelona ha admitido los pagos a empresas vinculadas a Negreira, Laporta mantuvo en su testimonio que estos eran por informes de scouting sobre árbitros. Alonso enfatizó la necesidad de una investigación profunda: «Lo que ha sucedido aquí realmente sorprende a la gente fuera de España, ya que no ha habido consecuencias ni responsabilidades asumidas».
Reacciones y presiones internas
La reciente formación del sindicato de árbitros español, AESAF, emitió un comunicado criticando las declaraciones de Pérez y defendiendo la integridad de los árbitros, afirmando que «ningún árbitro ha sido investigado o acusado» durante la pesquisa. Ante esto, Alonso comentó: «Es legítimo que todos defiendan sus propios intereses». Sin embargo, su posición como entrenador ha sido cuestionada tras una serie de resultados decepcionantes, aunque el equipo logró recuperarse con una victoria por 2-1 ante Alavés.
A pesar de las dudas sobre sus métodos y gestión del equipo, Alonso se mostró optimista respecto al futuro: «La situación antes y después de Alavés es la misma: tenemos una buena comunicación y estamos juntos en esto». Reconoció que su adaptación al cargo ha sido un proceso continuo: «El Xabi que llegó en junio no es el mismo ahora… Si somos un mejor equipo en marzo que ahora, eso sería una buena noticia».
Con el futuro del club en juego y la presión creciente sobre sus hombros, Alonso sabe que su capacidad para navegar esta tormenta será crucial para mantener la estabilidad en el vestuario y los resultados sobre el campo.
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