La reciente inclusión de Jude Bellingham y Arda Güler en el mediocampo del Real Madrid ha suscitado intensas discusiones sobre su compatibilidad. A medida que avanza la temporada 2024-2025, se hace evidente que la asociación entre estos dos talentosos jugadores no ha logrado generar la cohesión esperada. Según un análisis del medio español AS, cuando Bellingham y Güler juegan juntos, el equipo sufre una falta de equilibrio que afecta tanto la circulación del balón como la estructura ofensiva.
Desde el inicio de la temporada, las comparaciones han sido inevitables. En varias ocasiones, el Real Madrid ha mostrado un mediocampo más sólido y compacto en los partidos donde Arda Güler no ha estado presente. La diferencia es notable: sin él, el equipo puede imponer su ritmo de juego con mayor eficacia. Por el contrario, al alinear a Bellingham y Güler, el equipo ha enfrentado problemas de desorganización táctica, con una clara redundancia en las zonas de creación y una defensa que no logra mantener su solidez.
El desafío para Xabi Alonso
Con una crisis defensiva que persiste en el club, el entrenador Xabi Alonso se encuentra ante un dilema crucial: ¿debería seguir apostando por esta pareja en el mediocampo o regresar a un esquema más tradicional? La presión es alta para encontrar un balance entre aprovechar el potencial ofensivo de ambos jugadores y asegurar la fortaleza defensiva necesaria en competiciones como La Liga y la Champions League.
Perspectivas futuras
Hasta ahora, no ha surgido un plan claro que permita a Bellingham y Güler coexistir sin comprometer la estabilidad del equipo. La falta de control en el juego y la confusión táctica han pesado sobre el rendimiento del equipo en una fase crítica de la temporada. El club debe tomar una decisión rápida: adoptar un enfoque a largo plazo para consolidar esta dupla o reconocer que su asociación no es la ideal. Si se opta por lo segundo, será necesario implementar ajustes inmediatos para evitar perder el rumbo en una campaña llena de desafíos.
La elección de Xabi Alonso y cómo respondan los jugadores podría definir el futuro del proyecto deportivo del Real Madrid. Con cada partido que pasa, se hace más evidente que encontrar la armonía entre Bellingham y Güler será clave para alcanzar los objetivos del club en esta temporada.
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