La rivalidad entre el Real Madrid y el FC Barcelona sigue siendo uno de los ejes centrales del fútbol español. En un 2025 que ha sido fructífero para los Blaugranas, que se coronaron campeones de LaLiga en mayo, ganaron la Copa del Rey y la Supercopa de España, el equipo dirigido por Hansi Flick termina el año liderando la clasificación con cuatro puntos de ventaja sobre su eterno rival. Sin embargo, hay otra batalla que se libra entre estos gigantes: la de los derechos televisivos, una de las principales fuentes de ingresos para cualquier club.
Esta temporada, la asociación patronal ha distribuido 1.432 millones de euros a LaLiga y a la segunda división, una cifra ligeramente inferior a los 1.498 millones del año anterior. En este contexto, tanto el Real Madrid como el FC Barcelona se encuentran muy por delante en términos de ingresos por derechos televisivos. A pesar de haber sido campeones, los culés han visto caer sus ingresos de 162,49 millones a 156,45 millones de euros esta temporada. En contraste, el club blanco ha registrado una disminución más moderada; sus ingresos han pasado de 159,55 millones a 157,52 millones.
Un liderazgo cuestionado
Según información publicada por AS, el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, podría haber aumentado significativamente sus ingresos esta temporada. Sin embargo, el club optó por no aceptar algunas opciones propuestas por LaLiga que incluían nuevas alternativas audiovisuales. Esto significa que el equipo no está dispuesto a permitir cámaras dentro del vestuario o entrevistas previas y posteriores a los partidos. Para el Real Madrid, estos momentos son demasiado valiosos como para ser comercializados por la Liga.
La competencia se intensifica
El Atlético de Madrid completa el podio con 108,17 millones de euros, seguido del Athletic Bilbao con 67,50 millones y el Sevilla con 63,95 millones. La próxima temporada promete ser excepcional para LaLiga; con la carrera por el título cada vez más reñida y un Kylian Mbappé en un estado de forma impresionante, España está lista para ofrecer más emocionantes encuentros en 2026. Este año ha sido testigo de intensas emociones en la parte alta de la tabla y un último Clásico que cumplió con todas las expectativas.
La situación financiera actual plantea preguntas sobre cómo se desarrollará esta rivalidad histórica en el futuro. ¿Podrán los clubes españoles adaptarse a un entorno cambiante donde los derechos televisivos son fundamentales para su éxito? Con cada vez más competidores emergiendo y una economía que se ajusta constantemente, el interés por ver cómo se desenvuelven estas batallas es palpable.
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