Eder Militão ha sido víctima de la mala suerte en las últimas temporadas, enfrentándose a dos rupturas de ligamentos cruzados que lo han mantenido alejado de los terrenos de juego. Sin embargo, su determinación lo llevó a convertirse en un pilar defensivo para el Real Madrid en la temporada 2024-2025. Desde el inicio del ejercicio, el brasileño ha asumido un rol de liderazgo en una defensa que ha sufrido numerosas bajas.
Con las ausencias de Dani Carvajal, Antonio Rüdiger y David Alaba, el central de 27 años ha demostrado ser fundamental. Su regreso a la titularidad fue anticipado tras una lesión sufrida durante la pausa internacional de noviembre, donde se lastimó el aductor derecho en un encuentro con la selección brasileña contra Túnez. Militão tuvo que dejar a sus compañeros en partidos cruciales contra Elche y Olympiakos, pero logró regresar antes de lo esperado para enfrentar a Girona.
Un regreso precipitado
A pesar de su prematuro retorno, las circunstancias obligaron al cuerpo técnico del Real Madrid a apresurar su inclusión en el equipo. La falta de defensores disponibles dejó al entrenador Xabi Alonso con pocas opciones, y así fue como Militão volvió a la acción después de solo una semana. Su participación en los partidos contra Girona, Athletic Club y Celta resultó ser un error costoso, ya que el defensor sufrió una nueva lesión que lo mantendrá fuera por cuatro meses.
Consecuencias devastadoras para la defensa
La situación se ha vuelto crítica para la zaga merengue. Actualmente, seis defensores están lesionados, dejando solo cuatro disponibles para los próximos encuentros. Con Carvajal, Alaba, Mendy y otros fuera de combate, Rüdiger y Asencio son los únicos que quedan como opción viable en la defensa central. A medida que se acercan partidos importantes, Xabi Alonso se encuentra en una situación complicada al tener que gestionar un equipo diezmado.
El sacrificio de Militão durante el partido contra Celta de Vigo, donde se volvió a lesionar el aductor izquierdo, simboliza la falta de profundidad en la plantilla y plantea interrogantes sobre las decisiones tácticas del cuerpo técnico. ¿Podría Alonso haber manejado mejor la situación? Con el rendimiento del equipo en caída libre y una serie de resultados decepcionantes, es evidente que las decisiones tomadas han tenido un impacto negativo significativo.
La ausencia prolongada de Eder Militão será un duro golpe para el Real Madrid. Su liderazgo y habilidad defensiva son difíciles de reemplazar y su regreso será crucial para las aspiraciones del equipo en esta temporada. Con un futuro incierto por delante y una plantilla debilitada, los merengues deberán encontrar soluciones rápidas si quieren mantener sus esperanzas vivas en todas las competiciones.
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