El futuro de David Alaba y Antonio Rüdiger en el Real Madrid se encuentra en un punto crítico a medida que se acerca el final de sus contratos en junio. Ambos defensores, que llegaron al club como agentes libres, no han recibido ninguna propuesta formal para la renovación de sus vínculos con la entidad blanca, lo que plantea dudas sobre su continuidad en el equipo.
En el caso de Alaba, la situación es más preocupante. Desde su grave lesión en la rodilla, el austriaco ha luchado por recuperar su forma física y mantener una continuidad en el equipo. Las constantes recaídas musculares han mermado su capacidad para competir al máximo nivel, lo que ha llevado a la dirección del club a cuestionar su futuro. Además, su edad y el sentimiento de que ya ha alcanzado su pico en el Real Madrid juegan un papel crucial en esta evaluación. Aunque se le respeta profundamente por su contribución clave durante la campaña de la Ligaref=»/competition/champions-league/»>Liga de Campeones 2022, la dinámica actual no favorece su permanencia.
La carga económica complica la situación
Otro factor que juega en contra de Alaba es su elevado salario, que ronda los 22 millones de euros anuales. Este aspecto económico se vuelve un obstáculo significativo para cualquier negociación futura. Documentos filtrados anteriormente habían revelado la magnitud del contrato que firmó al llegar al club, incluyendo una prima de fichaje superior a 15 millones y diversas comisiones para su entorno. Según informes de AS, no ha habido ningún contacto por parte del club para discutir una posible extensión del contrato, lo que deja a Alaba con pocas opciones a seis meses de la finalización de su vínculo.
La situación de Rüdiger: más abierta
En contraste, el caso de Antonio Rüdiger es más matizado. Aunque también está en la misma situación contractual y no ha recibido propuestas formales, sus actuaciones en el campo y su liderazgo dentro del vestuario le otorgan ventaja. Si logra mantener un buen estado físico y evitar lesiones significativas hasta el final de la temporada, existe la posibilidad de que se le ofrezca una renovación. Sin embargo, nuevas ausencias podrían llevar al club a considerar un cambio completo en la línea defensiva.
A medida que ambos jugadores se acercan al final de sus contratos, el Real Madrid debe prepararse para lo inevitable: reforzar su defensa central. Nombres como Marc Guehi, Ibrahima Konaté y Dayot Upamecano están siendo discutidos como posibles refuerzos, aunque el club prefiere evitar entrar en subastas por estos talentos. A su vez, el talento interno sigue siendo una opción viable; Joan Martínez se presenta como una promesa emergente desde la cantera, habiendo regresado con fuerza tras una grave lesión.
Si Alaba y Rüdiger finalmente deciden partir, lo harán dejando un legado importante tras sus contribuciones significativas en las campañas europeas recientes. Los aficionados recordarán sus papeles cruciales durante las victorias en las Ligas de Campeones 2022 y 2024. Sin embargo, con la necesidad de anticipación latente, el Real Madrid se prepara para dar un nuevo giro a su defensa central.
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