Kylian Mbappé ha comenzado su aventura en el Real Madrid de manera espectacular, un hecho que pocos jugadores pueden igualar. En esta temporada, el delantero francés ha marcado 29 goles en solo 24 partidos, demostrando una eficacia impresionante. En su primera temporada completa con la camiseta blanca, ya había anotado 44 goles, cifras que lo sitúan entre los atacantes más prolíficos de la historia reciente del club. Tanto en términos intrínsecos como estadísticos, Mbappé se ha convertido en el mejor jugador del Real Madrid desde su llegada.
A pesar de que a veces puede parecer menos involucrado en el juego colectivo, su impacto es innegable. Un penalti forzado, una aceleración fulgurante o un disparo repentino son acciones que pueden cambiar el rumbo de un partido. Bajo la dirección de Xabi Alonso, se ha convertido en el hombre clave del equipo, aquel hacia quien todos miran en los momentos decisivos. Sin embargo, esta brillantez individual no es suficiente para satisfacer las expectativas del club. A pesar de haber ganado la Supercopa de Europaon/supercopa-espana/»>Supercopa de Europa y la Copa Intercontinental el año pasado, Mbappé mismo ha reconocido que estos trofeos no son los que forjan una leyenda.
La búsqueda de títulos
El Real Madrid vive por y para la Liga y, sobre todo, por la Liga de Campeones, recientemente conquistada por el PSG. Mientras esos títulos importantes sigan faltando en su palmarés con el Madrid, el debate sobre su legado permanecerá abierto. El club nunca juzga a sus jugadores únicamente por sus estadísticas; la historia es implacable y recuerda a los ganadores. Karim Benzema, Cristiano Ronaldo, Luka Modrić y otros no solo brillaron individualmente, sino que también acumularon trofeos en momentos clave.
Un rol táctico debatido
Mbappé es consciente de que ser excelente no es suficiente; debe ser decisivo en los grandes partidos europeos. Esta temporada, el equipo lucha por alcanzar al FC Barcelona en la Liga, mientras que la Liga de Campeones sigue siendo el objetivo primordial. Sin un título continental o un campeonato de España, su estatus seguirá siendo el de un gran jugador pero no aún una leyenda. Su posición en el campo también genera debate: aunque juega principalmente como delantero centro, a menudo retrocede para participar en la construcción del juego. Esta generosidad táctica es apreciada por su entrenador, pero plantea problemas de equilibrio.
Karim Benzema resumió esta situación con claridad: «Habrá partidos donde Mbappé ni siquiera tocará el balón. Lo que esperamos de Kylian es que lo meta al fondo cada vez que tenga una oportunidad». Este recordatorio es fiel a las exigencias del club madridista.
Comparaciones inevitables
No se puede evitar la comparación con Cristiano Ronaldo. En un partido reciente contra el Sevilla (2-0), Mbappé anotó su gol número 59 en 2025, igualando un récord histórico del portugués establecido en 2013. “Es increíble lograr tal hazaña en mi primer año, como Cristiano, el mejor jugador en la historia del Real Madrid”, comentó Mbappé, consciente de la magnitud de este momento.
En su cumpleaños, durante un partido en el Bernabéu, también recordó la importancia del compromiso colectivo: “Todos los aficionados quieren lo mismo. Debemos demostrar que no son solo palabras vacías y que damos todo por este escudo”. Por su parte, Xabi Alonso destacó que “Mbappé aporta mucho más que goles; trae liderazgo e influencia y realiza un enorme trabajo diario”. Este sentimiento es compartido dentro del vestuario.
Aunque parece estar plenamente integrado y muestra una mentalidad ejemplar, convertirse en una leyenda del Real Madrid requiere más. Se necesita longevidad y dominio sostenido; temporadas repetidas al más alto nivel son esenciales para ello. Vinicius Junior, a pesar de haber ganado dos Ligas de Campeones y casi haber sido consagrado con un Balón de Oro, todavía ve cuestionado su estatus.
Kylian Mbappé está bien encaminado hacia la grandeza. Superar los récords de Cristiano Ronaldo puede parecer casi inalcanzable; sin embargo, si logra asentarse firmemente en el Real Madrid y acumular temporadas excepcionales mientras guía al club hacia nuevos éxitos europeos, entonces la pregunta no será si se convertirá en una leyenda sino dónde se ubicará en la historia del club.
Hoy por hoy, Kylian Mbappé es una superestrella mundial y el líder ofensivo del Real Madrid. Mañana, con títulos importantes y una identidad de juego consolidada junto a un dominio prolongado, podría convertirse en una leyenda de la Casa Blanca. En Madrid, la historia exige mucho pero siempre recompensa a los más grandes.
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