El Real Madrid cerró el año 2025 sumido en la incertidumbre y la decepción. A pesar de los cambios en el banquillo y las prometedoras incorporaciones del verano, los resultados esperados no se materializaron. Este ha sido un año al borde del abismo, un periodo de agotamiento para los aficionados y la directiva. Durante estas fiestas, es natural dejarse llevar por reflexiones sobre lo que pudo haber sido. ¿Y si Declan Rice no hubiera ejecutado los tiros libres? Los devastadores goles del mediocampista del Arsenal desde situaciones a balón parado pusieron fin a las aspiraciones del Madrid en la Ligaref=»/competition/champions-league/»>Liga de Campeones. Uno de esos goles incluso fue nominado al premio Puskas, reflejando la rapidez con la que se desvanecieron las esperanzas merengues.
En realidad, el desempeño del Madrid en los dos partidos contra el Arsenal dejó claro que nunca fueron superiores. Incluso si hubieran logrado superar a los Gunners, el Paris Saint-Germain habría sido un rival formidable en la siguiente ronda. La reciente participación del Madrid en la Copa del Mundo de Clubes sirvió como un sombrío anticipo de lo que podría haber sido ese enfrentamiento, donde el equipo español se vio claramente superado.
Las decisiones de fichajes y su impacto
La llegada de Trent Alexander-Arnold al Santiago Bernabéu fue celebrada con entusiasmo, especialmente tras su presentación en español, lo que subrayó que su traspaso no fue una decisión impulsiva. La admiración entre jugador y club había ido creciendo durante años, y cuando surgió la oportunidad de ficharlo como agente libre —más allá de los 10 millones de euros pagados a Liverpool por su disponibilidad en la Copa—, el Madrid actuó rápidamente. Sin embargo, si Alexander-Arnold hubiera renovado con los Reds, es probable que el club hubiera optado por mantener a Lucas Vázquez y continuar rotando entre Dani Carvajal, Fede Valverde y Vázquez en el lateral derecho. El Madrid no habría sentido la necesidad urgente de realizar esa inversión.
Cambio en el banquillo: ¿Era necesario?
La salida de Carlo Ancelotti estuvo marcada por una profunda carga emocional. El entrenador más laureado del club dejó su puesto en circunstancias complicadas pero inevitables. Ancelotti había perdido su capacidad táctica en partidos decisivos, mientras que un plantel lleno de talento mostraba un rendimiento inferior al esperado. Así llegó Xabi Alonso, quien asumió el cargo con grandes expectativas. Sin embargo, Alonso ha descubierto que gestionar el vestuario del Madrid es más desafiante de lo que pensaba. En lugar de implementar su visión futbolística, se ha visto obligado a adoptar un enfoque más pragmático, navegando entre resultados sin poder establecer una identidad clara.
¿Habría producido una continuidad bajo Ancelotti una recuperación similar a la que se vio en la temporada 2023-24 tras una campaña decepcionante? O tal vez la situación habría llegado a tal punto que su despido sería inevitable. La respuesta es incierta; no obstante, el estado actual del club sugiere que los problemas son más profundos que cualquier decisión individual.
A medida que el Real Madrid entra en 2026, se enfrenta a preguntas críticas sobre su futuro. ¿Podrán encontrar la dirección adecuada para revertir esta tendencia negativa? La afición espera respuestas y resultados en este nuevo capítulo.
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