El Real Madrid Baloncesto se enfrenta a un desafío en casa, superando a un Paris Basketball en crisis avecinando un final tenso que culmina en una victoria por 95-90.
Tras el regreso de la trégua internacional, el Real Madrid Baloncesto había acumulado cuatro victorias en cinco encuentros europeos, una racha prometedora. En contraste, el Paris Basketball llegaba a este duelo con tres derrotas consecutivas en todas las competiciones. Sin embargo, a pesar de su posición en la parte baja de la EuroLeague, los parisinos pusieron en aprietos al líder de la Liga durante gran parte del partido disputado en la jornada 17 de la EuroLeague. El equipo blanco, aunque presionado, logró salir adelante gracias a un Théo Maledon que brilló en los momentos decisivos.
Un inicio dominante pero inquietante
Como es habitual desde el inicio de la temporada, el Real Madrid comenzó con fuerza, mientras que el Paris Basketball se mostraba lento y desorganizado. Los locales, más completos en ataque, alternaban entre penetraciones y tiros rápidos, aprovechando las debilidades defensivas del equipo visitante. Sin embargo, tras una primera rotación, Paris comenzó a hacer daño. Con actuaciones destacadas de Lamar Stevens y Yakuba Ouattara, los parisinos lograron un parcial de 2-12 que sorprendió a la Casa Blanca. A pesar de ello, Théo Maledon se encargó de mantener al Madrid por delante al final del primer cuarto (24-21), marcando su nombre en la historia al sobrepasar el millón de puntos en la EuroLeague.
La lucha por el control del ritmo
A medida que avanzaba el segundo y tercer cuarto, el Real Madrid Baloncesto no podía mantener el ritmo impuesto por los visitantes. La velocidad del Paris Basketball se hizo evidente, obligando al equipo madrileño a adoptar una defensa más agresiva que dejaba espacios en su zona pintada. Este enfoque defensivo resultó costoso; los blancos cometieron siete pérdidas de balón en la primera mitad y no lograron romper el ritmo del juego. La presión constante del Paris en los rebotes ofensivos y su buena puntería desde el perímetro (12/25 durante los primeros tres cuartos) les permitió tomar una ventaja de dos posesiones al inicio del último cuarto (70-74).
El resurgimiento de Maledon
A pesar de estar bajo presión, el Real Madrid no se dejó dominar. Su sólida defensa impidió que Paris capitalizara sus oportunidades. Conscientes del compromiso parisino en el rebote ofensivo, los merengues encontraron oportunidades para anotar rápidamente con pases largos tras recuperar el balón. Usman Garuba emergió como un factor clave con su presencia en la pintura, mientras que Théo Maledon asumió el liderazgo necesario. El base francés tomó decisiones acertadas y mostró calma bajo presión, contrastando con la falta de experiencia del Paris Basketball en momentos críticos.
A pesar de algunos errores cruciales por parte del Madrid que les impidieron cerrar el partido antes de tiempo, Maledon selló la victoria con un tiro decisivo que dejó sin opciones a Nadir Hifi. El encuentro terminó 95-90, dejando lecciones tácticas importantes para ambos equipos y reafirmando la capacidad del Real Madrid para gestionar momentos difíciles.
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