El Real Madrid sufrió una dura derrota en su regreso al Santiago Bernabéu, cayendo 0-2 ante el Celta de Vigo. Desde el inicio del partido, los blancos se encontraron con dificultades. En la séptima minuto, el equipo gallego ya había puesto a prueba a Thibaut Courtois, quien se vio obligado a intervenir tras un intento de Fran García. Los visitantes, decididos y creativos, continuaron presionando, haciendo que la defensa del Madrid se tambaleara, especialmente con Raúl Asencio enfrentándose a una intensa presión.
A medida que avanzaba el primer tiempo, el Real Madrid comenzó a mostrar algo de presencia en ataque. Sin embargo, la situación se complicó aún más cuando Éder Militão sufrió una lesión que lo obligó a abandonar el campo antes de tiempo. Su reemplazo, Antonio Rüdiger, intentó estabilizar la defensa, pero el equipo no logró concretar sus ocasiones. A pesar de dominar la posesión del balón (62% en la primera mitad), las oportunidades claras fueron escasas. La primera llegada con peligro no llegó hasta el minuto 34, cuando Arda Güler disparó a puerta, pero Radu detuvo sin problemas. El Madrid se marchó al descanso sin haber marcado.
Un segundo tiempo desastroso
La segunda mitad comenzó con un ímpetu renovado por parte del Real Madrid, pero fue el Celta quien golpeó primero. En el minuto 54, Williot Swedberg sorprendió al Bernabéu con un gol espectacular que abrió el marcador. La entrada de Rodrygo Goes en sustitución de Raúl Asencio no logró cambiar el rumbo del partido. La tensión aumentó rápidamente, resultando en una serie de tarjetas amarillas para los jugadores del Madrid (Bellingham y Fran García). En un giro desafortunado para los merengues, García recibió su segundo amarilla y fue expulsado poco después.
Oportunidades perdidas y un final caótico
Con un jugador menos y la frustración palpable en el ambiente, Kylian Mbappé tuvo una gran oportunidad para igualar el marcador en el minuto 74, pero su intento de lob falló. El Madrid luchaba por encontrar su ritmo ofensivo y las esperanzas parecían desvanecerse. La llegada de Gonzalo García ofreció algo de frescura al ataque; su cabezazo en el minuto 87 rozó el poste gallego y dejó escapar la posibilidad de rescatar un punto.
El final del partido fue caótico, con expulsiones adicionales para Carreras y Endrick. Para colmo de males, el Celta selló su victoria con un segundo gol que dejó al Madrid tambaleándose antes de su crucial encuentro contra el Manchester City en la Ligaref=»/competition/champions-league/»>Liga de Campeones este miércoles.
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