El entrenador del Sevilla, Matías Almeyda, se mostró muy crítico tras la derrota de su equipo por 2-0 frente al Real Madrid en el Santiago Bernabéu. En la rueda de prensa posterior al partido, Almeyda abordó varios temas, incluyendo el arbitraje, su expulsión y la actuación de su equipo en un escenario tan emblemático.
Almeyda fue enviado a las gradas después de protestar una falta, y no dudó en expresar su descontento con la actuación del árbitro. “Me expulsaron por protestar una falta. Quisiera que escucharan las grabaciones de audio, porque es fácil sacar tarjetas. No soy un payaso; tengo mi propia historia y soy una persona que busca el diálogo. Solicito que se revisen las grabaciones”, afirmó el técnico argentino. A pesar de su frustración, también felicitó al Real Madrid por su victoria, aclarando que “no fueron favorecidos por el resultado”. Sin embargo, reiteró que “el arbitraje fue muy deficiente” y que su expulsión se debió a la falta de respeto hacia sus reclamos sobre el respeto en el juego.
La importancia del diálogo con los árbitros
En su intervención, Almeyda subrayó la necesidad de una comunicación efectiva entre los jugadores, entrenadores y árbitros. “Hemos tenido charlas y participo en el diálogo porque todos formamos parte del mismo juego. El diálogo debe ser posible; no se pueden sacar tarjetas amarillas sin razón, eso duele”, comentó. El técnico enfatizó que es fundamental encontrar un equilibrio: “No estoy satisfecho con el arbitraje y no puedo quedarme callado. Prefiero ser quien habla que quien se queda en silencio; esos son traidores, y yo no lo soy”.
Valoración del rendimiento del Sevilla
A pesar del resultado adverso, Almeyda no escatimó elogios hacia sus jugadores por su esfuerzo y compromiso en el partido. “Quiero agradecer a mi grupo por su dedicación. Jugamos bien contra un rival con jugadores impresionantes. Supimos bloquearlos y crear nuestras oportunidades”, destacó. En relación a la atmósfera del Bernabéu, expresó que su equipo llegó con confianza: “Vinimos aquí a jugar como si estuviéramos en casa. Reconocemos la calidad del oponente y jugamos con esa mentalidad. Esa es nuestra filosofía, lo hemos intentado durante todo este semestre”.
Al final de la conferencia, Almeyda reafirmó su compromiso con el equipo y su deseo de seguir construyendo una identidad sólida en cada partido. Con esta derrota, Sevilla deberá reflexionar sobre sus próximos pasos mientras busca mejorar en la liga.
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